La gran mayoría de los conocimientos históricos que tenemos están compuestos por hechos reales y mitos alrededor de ellos, y la fundación de Tenochtitlan, no es la excepción.
Hecho Real: Al llegar los Aztecas al Lago de Texcoco, existían diversos pueblos asentados en los alrededores, siendo los Tepanecas el grupo que ejercía mayor control en virtud de estar asentados estratégicamente, Tezozómoc gobernaba a los Tepanecas desde Azcapotzalco y su hijo Maxtla gobernaba desde Coyoacán, teniendo de esta manera un control estratégico de la zona.
Los Aztecas llegan y se dan cuenta de inmediato que Tezozómoc era quien debía autorizarlos a asentarse en terrenos de la zona, por lo que solicitan su permiso y este, señor sabio y hábil gobernante, vio de inmediato la conveniencia de apoyarlos. Por lo tanto, les permitió ocupar algunos islotes del lago, a cambio de (i) pago de tributo; y (ii) alianza en caso de guerra con otros señoríos. De esta manera Tezozómoc tendría mercenarios asentados en los islotes que hacían frontera con otros pueblos y señoríos, para el caso de guerra y al mismo tiempo recibiría el pago del tributo, con productos lacustres.
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Por lo tanto, como dice el Profesor Arqueólogo Don Eduardo Matos Moctezuma, “queda claro, pues, que el asentamiento se dio porque así convenía al señor Tezozómoc”.
